Mañana por la noche.

Es todo tan lindo que no lo entiendo. Me arden un poco los ojos. Y mis oídos quieren tener un orgasmo permanente. La música los hace alterarse hasta ser, vivir, casi por propia custodia. Un día se van a despegar de mi oreja y se van a adherir a un parlante Marshall para poder escuchar toda su eterna vida. Tanto, pero tanto hay.. que a veces creo que no voy a tener tiempo de escucharlo todo. Pero después pienso un poquito mas a fondo y me doy cuenta que pensando que no voy a tener tiempo, ya prácticamente lo estoy perdiendo, asíque corro despavorida por mi hogar hasta encontrarme escuchando. Cada día me desprendo mas de eso,y me apego mas a ello. ¿O ellos? Descubrir libros y música diferente en mi lugar cada día, es una cosa tan interesante. Yo creo que me conoce demasiado, y sabe lo que me gusta dificilmente encontrarlos.

Me pararía enfrente suyo mientras espera el colectivo, a decirle nada mas: +Sos el alma que ilumina la mía.+

No hay comentarios: